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SALA 1: Violencia hacia otros cuerpos

La violencia no se limita a la alteración del cuerpo propio, sino que también abarca una gran cantidad de manifestaciones. Dentro de ellas está contemplada la violencia que como individuos generamos hacia otros cuerpos. Cuerpos de otros seres vivientes. 

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Desde matar a una gallina hasta la modificación genética de una planta, la incursión filosófica que nos propone esta sala es aquella que tiene que ver con la ciencia, la interacción, la biología, la ética, la ecología, el animalismo, etc., 

y  nos hace reflexionar sobre aspectos que trascienden nuestra individualidad, permitiéndonos encarar una realidad comprendida desde el colectivo y la convivencia con otros seres vivos.

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A continuación, observarán una recopilación de obras y propuestas artísticas en las que se evidencia el vínculo entre cuerpos que se violentan unos a otros de diversas maneras.

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Tv Hijack, 1972

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En esta performance Burden en medio de una entrevista que se estaba transmitiendo en vivo por televisión, puso un cuchillo en el cuello a su entrevistadora Phyllis Lutjeans mostrando una escena de secuestro. Burden amenazó la vida de Lutjeans si la estación dejaba de transmitir en vivo. Al final Burden tomo una grabación de dicha performance y la destruyó empapándola con acetona.

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Aquí el artista en vez de usar su cuerpo, juega con los roles y con los otros cuerpos de forma violenta, siendo el quien ejerce esta violencia hacia la entrevistadora.

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En esta pieza se cuestiona la violencia ejerciéndola, a la par que se hace una crítica a la censura, ya que, a pesar de que la estación le pidió a Burden realizar unas piezas, censuraron varias de las propuestas de Burden para al final decantarse por una entrevista.

Tv Hijack 1972.jpg

Death of a Chicken, 1972

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Por su tendencia a vincularse con sus raíces cubanas, Ana Mendieta en este performance decapita un pollo y lo deja sangar sosteniéndolo en sus brazos durante unos minutos, esto por su interés en las prácticas de la cultura que lleva en su identidad. Como un acto de purificación, el acto primitivo y violento de sacrificar otro cuerpo en función de potenciar su feminidad. Su postura apunta a una visión distanciada del objetivo mitológico del acto, tomando su simbología para referirse a situaciones modernas a modo de ritual en las que se sacrifica al otro por auto complacencia e intereses individuales.

Alba, 2000

Una coneja transgénica que lleva genes de otra especie aplicados por medio de la ingeniería genética. En este caso, los genes incorporados a Alba  pertenecían a un ejemplar de la medusa Aequorea Victoria, que vive en la zona noroeste del Océano Pacífico y que emite una brillante luz verde cuando es expuesta a los rayos ultravioletas o a una luz azul.

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Mientras que activistas por los derechos animales así como grupos religiosos han exclamado que no es ético que los científicos o los artistas inserten genes de una especie en otra, Eduardo Kac les contesta que sólo ha dado un paso más en la manipulación genética ampliamente aceptada. Durante siglos —advierte— el hombre ha criado animales, como por ejemplo los perros, buscando ciertas características estéticas. Los monjes en el siglo VI criaron conejos para crear ciertos colores y cualidades de su pelo. Y también recalcó que el procedimiento para producir a Alba fue completamente seguro.

Eduardo conejos.JPG
Eduardo flor.JPG

Edunia, 2009

La pieza, como el propio Kac señala, es una "plantimal", una nueva forma creada a partir de una planta y un animal que el artista ha bautizado como Edunia.

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La flor es una variedad de petunia que Kac inventó y produjo a través de la biología molecular y que "no se encuentra en la naturaleza, porque -explica- se trata de dos especies diferentes". Mezcló su propia estructura genética con la de la petunia y este fue el resultado.

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Otras piezas de la serie son Seed Packs, sobres que contienen semillas de Edunia que dan información sobre el período de floración, y que parecieran en realidad pequeñas esculturas.

Kac  explora la triple relación entre biología, tecnología de la información e interacción dialógica. Genesis se basó en la creación de lo que su autor denominó un “gen artístico”, es decir, un gen sintético inventado por el artista.

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Este gen tradujo una frase del Génesis (libro bíblico) al código Morse, convirtiéndolo luego en una base de pares de ADN. El texto genético transcribía: “Que el hombre tenga dominio sobre los peces del mar, sobre los pájaros del aire y sobre todo ser viviente en esta tierra”.

 

La exhibición permitía la participación local pero también remota -a través de Internet- mediante el apagado y encendido de una luz ultra violeta. La proteína fluorescente en la bacteria respondía a este estímulo, emitiendo una luz amarilla visible. Al encender la luz, se producían distintos colores en la caja de vidrio donde la bacteria estaba exhibida.

En relación a esta obra, Kac explicó: "Hoy el triple sistema de lenguajes de Génesis (lenguaje natural, código ADN y lógica binaria) es la clave para entender el futuro […]. Los límites entre la vida basada en carbono y la data digital se están volviendo tan frágiles como la membrana de una célula". 

Genesis, 1998-1999

(Para seguir el recorrido de la exposición, click aquí)

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